Godiva de Lush, champú sólido para cabello seco

Hace cinco meses el blog dejó de tener actividad. Así, sin más. Sin avisar, pero es que apenas me di cuenta porque al hecho de que Baby Cremosita forma parte de mi vida, me vi inmersa en una mudanza y en dos semanas me esperaba una operación de espalda, por lo que estar delante del ordenador era incompatible. Así que durante este tiempo he estado, en la medida de lo posible, en Instagram. Aparte del correo electrónico (qué haríamos sin los móviles...), esa red social me ha permitido mantener el contacto con mis lectores y cómo no decirlo, recibir mucho cariño en forma de comentarios y mensajes privados. Y hoy vuelvo con las dos publicaciones semanales de siempre.

Me encanta que el primer post, después de este parón forzoso, sea del champú sólido Godiva de Lush. Tenía muchas ganas de probar un champú en pastilla por las buenas opiniones que siempre habían llegado a mis oídos, pero nunca llegaba el momento. Sin embargo, la inauguración de la nueva tienda Lush en Sevilla me lo puso muy fácil y, sin pestañear, lo elegí de entre los once que hay disponibles (algunos solo son exclusivos on line).

Cantidad:

55 gramos

Precio:

9,95 euros

Composición:

Está elaborado a base de aceites de camelia, ylan ylan, ciprés, palmarosa, jojoba, nuez de macadamia y coco virgen extra, y mantecas de cacao, cupuacu y karité.

Opinión personal:

Este champú está indicado para cabellos secos que necesitan nutrición. Y ese, precisamente, es el caso de mis rizos.

- Textura: Es una pastilla sólida y, por tanto, dura. Tiene trocitos de karité que, al tacto cuando ya se ha usado varias veces y está mojada, son un poco más blandos.

- Olor: Jazmín. A mí, que soy amante de esa flor, me encanta. Además, el olor se queda en el pelo.

- Hidratación: Hidrata mucho pero no se puede prescindir de mascarilla, suavizante o acondicionador para desenredar o peinar el cabello con facilidad.

- ¿Hace espuma? Sí.

- ¿Da grasa? No.

- ¿Cunde? Depende cuántas veces lo uses y de cómo tengas el pelo. Mi pelo pasa un poco los hombros y uso productos para dar forma a mis ondas, por lo que lavarme una sola vez el pelo me resulta insuficiente. Lo normal es darle dos o tres repasos con champú y agua antes de la mascarilla. Sin usar otro champú me ha durado un mes.

- ¿Es cómodo este formato? Depende de tu ritmo de vida. 

Yo siempre quise probarlo para llevármelo de viaje, porque al ser una pastilla sólida, no se derrama. Aunque si te duchas fuera de casa, como puede ser en el gimnasio, también veo que tiene un punto muy positivo. Lo único es que necesitas una cajita para guardarlo porque Lush se caracteriza por presentar sus productos sin embalajes, siempre y cuando se pueda prescindir de él, con la finalidad de preservar el medio ambiente. La marca tiene una cajita metálica para ese fin que cuesta dos euros.

El único inconveniente que tiene es que, tal y como le sucede a todas las pastillas, cuando se va gastando se rompe.

- ¿Cómo se usa? Hay dos opciones:

   --- Mojar la pastilla y frotarla entre las manos, y la espuma resultante distribuirla por el pelo. Curiosamente no es solo espuma, sino que da para limpiar el pelo. Prueba y me cuentas.

   --- Mojar la pastilla y frotarla por la cabeza. Tal cual. Sale mucha más espuma que con la primera opción.

- Eficacia: En mi caso me ha parecido muy buen producto porque nutre el cabello y deja un olor estupendo.

- ¿Repetiría? No es un producto económico pero el formato me parece muy cómodo en viajes y gimnasio, por ejemplo. De manera que desde luego que repetiría.

¿Lo has probado?

¿Algún favorito de Lush?

¡Besos! ¡gracias por tu comentario!